Cientos de
vecinos y comerciantes del barrio de Colegiales se concentraron ayer en la
esquina de la Avenida
Federico Lacroze y Crámer, lugar donde el Gobierno porteño
inaugurará en los próximos días un viaducto que pasará por debajo de las vías
del ferrocarril Mitre, y manifestaron su intención de conservar el paso
peatonal a nivel, el cual sería cerrado y reemplazado por una rampa y una
escalera que irán bajo tierra.
Ante la
inminente apertura del túnel proyectado por el Gobierno que encabeza Mauricio
Macri, el cual tendrá 267
metros de largo entre las calles Conesa y Amenábar,
quienes asistieron a la protesta dejaron en claro que el cierre del paso
peatonal a nivel en cuestión dividirá al barrio y complicará el tránsito de los
peatones debido a los estrechos pasos que se proyectan construir bajo tierra,
ya que habrá una rampa de 1,30
metros de ancho y una escalera de un metro por las que
circularán más de cuatro mil personas por día.
Es por esto que
Ernesto Golomb, uno de los vecinos que hace meses reclama por mantener los
pasos a nivel, tomó la palabra durante la convocatoria y expresó que "El Gobierno porteño omitió el conteo de
peatones que circula por el lugar en el Estudio de Impacto Ambiental que
realizó, y esto se traduce en no tener en cuenta la circulación que genera una
estación ferroviaria como la de Colegiales, por la cual pasan 88 trenes al día.
A su vez, las personas discapacitadas, la gente mayor y aquellos que se
trasladan con changuitos y bicicletas se verán afectados tanto por la
inclinación de la rampa en el caso de las sillas de ruedas como por lo estrecho
de estos pasos".
Otro de los
presentes en la manifestación impulsada en las redes sociales fue Carlos Funes,
Comunero del Frente Nuevo Encuentro en la Comuna 13, quien escuchó a los vecinos y a su vez
les aseguró que "Este viaducto tiene
características únicas, por eso el reclamo es justo. El cierre de los pasos
peatonales a nivel lo único que provocará es un barrio quebrado y afectará al
centro comercial a partir del cual se conformó Colegiales. Por eso no pueden
dejar de movilizarse y seguir dando la discusión. Si ustedes no salen a la
calle, las obras que proyectó el Gobierno de la Ciudad no van a sufrir
cambios".
Tras más de una
hora y media de debate, los vecinos coincidieron en que la división del barrio
que sufrirían los peatones sería el efecto contrario a la intención del
programa de conectividad impulsado por las autoridades porteñas, que sin dudas
olvidó a la gente de a pie. En este contexto, se comprometieron a continuar con
el reclamo para mantener una instancia de diálogo con los dirigentes que les
permita alcanzar el objetivo de conservar el paso peatonal a nivel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario